Ese triángulo invertido que nos grita exclusividad, con nombre o sin nombre identificamos que en sus entrañas vienen de Milano. Prada es quién nos ha inspirado.
Esta es la evolución del logo de PRADA, que si nos vamos a los términos correctos estamos hablando de su imagotipo. Esta firma con el paso del tiempo se ha mantenido y ha sido reflejo fiel de una transición de lujo con visiones modernas y hasta minimalistas.
Prada es una firma de origen italiano, nació en 1913 pero el emblema real se dió de 1919.
En 1919, PRADA fue nombrada proveedor oficial de la Casa Real de Italia, lo que le permitió incorporar elementos heráldicos de la Casa de Saboya en su logo. Este primer emblema incluía una cuerda náutica que formaba un óvalo, dentro del cual se encontraba el nombre “PRADA” en tipografía serif, acompañado del escudo de armas real y la inscripción “Milano” y “Dal 1913”.

A finales de los años 80, bajo la dirección creativa de Miuccia Prada, la marca tomó una estética más minimalista o estética. El logo se simplificó, eliminando los elementos heráldicos, y se centró en una tipografía serif personalizada, con letras mayúsculas que combinan trazos finos y gruesos.
Esta tipografía ha permanecido constante hasta la fecha, convirtiéndose en un símbolo de elegancia y modernidad.

El triángulo invertido de PRADA, ¿cuándo llegó?
En los años 2000, Prada introdujo el icónico triángulo invertido como parte de su identidad visual.
Este símbolo se utiliza principalmente en accesorios como bolsos y carteras, y ha sido asociado con la colección Re-Edition 2005, que reinterpreta modelos clásicos con un enfoque contemporáneo y sostenible.
En la colección primavera/verano 2021, PRADA presentó una colaboración entre Miuccia Prada y Raf Simons, destacando el logo en piezas como pendientes y bolsos. Esta colaboración subrayó el enfoque minimalista y moderno de la marca, con el logo como elemento central de la colección. Aquí es donde nos piden tomar atención a este logo más allá de la tipografía.


El logo de PRADA ha evolucionado desde un emblema real cargado de simbolismo hacia una representación minimalista y moderna, siempre ha mantenido una identidad coherente que refleja su legado y visión.
Parecería que PRADA nació con ese triángulo invertido que de manera sociológica nos habla de simplicidad y equilibrió pero no fue así.
Es un símbolo inmediatamente reconocible que representa lujo, elegancia e historia de la firma. PRADA fue una de las primeras marcas en usar un triángulo invertido como logotipo, algo poco convencional, lo que reflejaba su espíritu vanguardista y su desafío a las normas convencionales.

En muchos productos como bolsos de nylon, ropa o accesorios, el triángulo funciona casi como un sello de autenticidad y prestigio. Es un ícono dentro del mundo de la moda.
Al usar el triángulo invertido, PRADA juega con el orden jerárquico, una declaración sutil de rebeldía y modernidad.
¿Qué nos dice el triángulo de PRADA?
El triángulo tiene connotaciones de equilibrio, estabilidad y estructura, pero al invertirlo, sugiere dinamismo e innovación. Mientras otras marcas optan por escudos, iniciales o coronas, PRADA adopta un diseño minimalista y funcionalista.
En algunas colecciones, el triángulo se reinterpreta: lo cortan, lo agrandan o lo abstraen, manteniéndolo reconocible pero adaptado al diseño del momento. El triángulo de PRADA ha logrado lo que pocas marcas de moda han hecho, decirnos quienes son sin texto.
Fotos: Grunway y especial.




