En medio del confinamiento global por la pandemia
de COVID-19, cuando los lazos humanos parecían más frágiles que nunca, unos jóvenes emprendedores
mexicanos encontraron en la crisis una oportunidad. En junio de 2020 nació CLIX Social, la primera plataforma que
logró conectar a marcas con su cliente ideal a través de recomendaciones reales y auténticas.
El nombre CLIX proviene del término en inglés clique, que hace referencia a ese grupo social que comparte intereses y gustos similares.
Justamente esa fue la esencia con la que nació el proyecto: crear una comunidad especial donde las conexiones fluyeran de forma natural.
La idea detrás de CLIX siempre fue generar valor compartido. “Convertimos la idea de CLIX en un apoyo a los restaurantes por estas etapas complicadas”, recuerda
Paulina, quien junto a su socio Carlos lanzó el emprendimiento desde Monterrey.
Ambos estudiaron Administración de Empresas en el Tecnológico de Monterrey, y aunque esta fue su primera empresa formal, la visión y la actitud emprendedora
marcaron el rumbo desde el inicio.
“La estrategia de Clix es de ganar-ganar + ganar. Ganan
las marcas, recibiendo nuevos clientes, recomendaciones y visibilidad orgánica, los Clixers porque descubren nuevos lugares, disfrutan de beneficios exclusivos y se llevan una experiencia única y Clix gana por que cierra el círculo y cumple su misión, unir marcas y personas reales a través de experiencias que generan valor”, afirma Paulina.
Un modelo de “ganar-ganar” en tiempos de crisis
Paulina Rodríguez, su cofundadora, lo tenía claro desde el inicio: “Desarrollamos una plataforma que le permitiera a los Clixers intercambiar contenido por la facilidad de disfrutar más y mejores experiencias con sus amigos”.
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