El concepto gira alrededor del sándwich, pero no cualquier sándwich. Aquí todo sucede dentro de un bretzel alemán, un pan poco común en México que marca la diferencia desde el primer bocado. Puedes elegir entre tres tipos de pan: parmesano, semillas o el tradicional —cada uno aporta una personalidad distinta a la experiencia.
Todos los sadwiches se sirven con hojuelas de papas fritas o con ensalada, en el menú también puedes ordenar opciones Veggie.
Por la mañana, puedes encontrar en el menú omelette de jamón y manchego pero si vas a lo Feroz nuestra recomendación es clara: un Cubano Feroz, que se compone de jamón de pavo y cerdo deshebrado al estilo cubano y queso emmental y pepinillos en pan planchado con mantequilla de ajo, este puedes acompañarlo con un cafecito de Panadería Alcázar, que está justo a un lado, y disfrutarlo sin apuros. Este es el combo perfecto para empezar el día.
Si vas por la tarde, el Cubano Feroz puede acompañarse con algo más refrescante: una cerveza bien fría o un agua mineral funcionan perfecto para equilibrar lo contundente del sándwich.
Y si eliges el Dip’n French, que fue mi favorito, este se compone de Roast beef de la casa, queso Emmental derretido con mayonesa de cebollin, servido con ¡¡¡JUGO DE CARNE!!! Esta fue mi parte favorita, lo sumergi a cada bocado y lo elegí con pan parmesa, soy de saboresmaduros, el maridaje ideal cambia de ritmo conuna copa de vino blanco o, si no bebes alcohol, una fresca mandarina felix que acompaña bien.
El costo por persona si incluyes vino va alrrededor de 500 pesos por persona, es ideal para comer y seguir con las actividades, no es un lugar para quedarse pero el momento que pases ahí realmente lo disfrutarás.
En Feroz encontramos buen producto, un concepto claro y la sensación de haber encontrado un spot al que sí vas a querer volver.
RRevista 